Paseo por la tarde
Comenzando desde el puerto de Laredo y por la calle Raimundo Revilla, cruzamos la calle del Paseo y subimos la cuesta del Infierno tomando a la izquierda y luego a la derecha para coger la subida a la Atalaya.
Unas escaleras para hacer pierna al lado del cementerio y siempre vigilante Santa María mirándonos. Despues de una subida nada costosa, llegamos a la cima, desde allí las vistas son espectaculares. Monte Buciero vigilante de las bahías de Santoña y Laredo, Montehano y al sur Candiano y la cordillera Cantabrica.
Ya paseando por todo el recinto y al norte, el Cantabrico que hoy se encontraba precioso, tranquilo y lleno de barcos deportivos a la pesca de jibiones, llenaban el paisaje en el horizonte. Visita obligada si se llega a Laredo, para disfrutar de toda la villa y sus alrededores.
Ya paseando por todo el recinto y al norte, el Cantabrico que hoy se encontraba precioso, tranquilo y lleno de barcos deportivos a la pesca de jibiones, llenaban el paisaje en el horizonte. Visita obligada si se llega a Laredo, para disfrutar de toda la villa y sus alrededores.
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